El anís es una especia con un sabor distintivo, similar al regaliz, que se usa ampliamente para cocinar y hornear. Pero, ¿sabías que el anís también tiene muchos beneficios y usos para la salud? En esta publicación de blog, exploraremos algunas de las formas en que el anís natural puede mejorar su salud y bienestar.
¿Qué es el anís?
El anís, también conocido como anís o Pimpinella anisum, es una planta que pertenece a la misma familia que las zanahorias, el apio y el perejil. Crece hasta 3 pies (1 metro) de altura y produce flores blancas y pequeñas semillas que se utilizan como especia. El anís tiene una larga historia de uso en la medicina tradicional, especialmente en la India y Oriente Medio, donde es valorado por sus propiedades digestivas, respiratorias y que mejoran el estado de ánimo.
El anís es rico en nutrientes, antioxidantes y fitoquímicos que pueden tener efectos beneficiosos sobre diversos aspectos de la salud. Una cucharada (7 gramos) de semillas de anís proporciona aproximadamente ( 3 ):
- Calorías: 23
- Proteína: 1 gramo
- Grasa: 1 gramo
- Carbohidratos: 3 gramos
- Fibra: 1 gramo
- Hierro: 13% de la ingesta diaria de referencia (IDR)
- Manganeso: 7% de la IDR
- Calcio: 4% de la IDR
- Magnesio: 3% de la IDR
- Fósforo: 3% de la IDR
- Potasio: 3% de la IDR
- Cobre: 3% de la IDR
El anís también contiene vitaminas C y A, así como otros compuestos como anetol, estragole, limoneno y pineno que le confieren su aroma y sabor característicos.
Beneficios para la salud y usos del anís
Estos son algunos de los beneficios para la salud y usos del anís que están respaldados por evidencia científica:
- Puede reducir los síntomas de la depresión
La depresión es un trastorno mental común que afecta a millones de personas en todo el mundo. Puede causar sentimientos persistentes de tristeza, desesperanza, pérdida de interés y baja autoestima. La depresión también puede interferir con el funcionamiento diario y la calidad de vida.
Varios estudios han demostrado que el anís puede ayudar a reducir los síntomas de la depresión mediante la modulación de sustancias químicas cerebrales como la serotonina, la dopamina y la norepinefrina. Estos neurotransmisores están involucrados en la regulación del estado de ánimo, la motivación, la memoria y la cognición.
Por ejemplo, un estudio mostró que el extracto de anís exhibía propiedades antidepresivas en ratones y era tan efectivo como la fluoxetina, un medicamento recetado común para la depresión ( 5 ). Otro estudio encontró que tomar 3 gramos de anís en polvo tres veces al día durante cuatro semanas mejoró los síntomas de la depresión posparto en las mujeres (6). Del mismo modo, tomar 200 mg de cápsulas de aceite de anís tres veces al día durante cuatro semanas redujo los síntomas de depresión leve a moderada en adultos ( 7 ).
- Podría proteger contra las úlceras estomacales
Las úlceras estomacales, también conocidas como úlceras gástricas, son llagas dolorosas que se forman en el revestimiento del estómago. Pueden causar síntomas como indigestión, náuseas, vómitos y sangrado. Las úlceras estomacales a menudo son causadas por una infección bacteriana llamada Helicobacter pylori (H. pylori), o por el uso de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) como la aspirina o el ibuprofeno.
El anís puede ayudar a prevenir y tratar las úlceras estomacales al inhibir el crecimiento de H. pylori y reducir la secreción de ácido estomacal. El anís también tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que pueden proteger el revestimiento del estómago del daño.
Un estudio en animales encontró que el anís redujo la secreción de ácido estomacal en un 50% y previno la formación de úlceras en ratas con úlceras inducidas (8). Otro estudio en animales mostró que el aceite de anís inhibió el crecimiento de H. pylori y redujo el tamaño de la úlcera en un 75% (9). Sin embargo, se necesitan más estudios en humanos para confirmar estos efectos.
- Puede mejorar el control del azúcar en la sangre
La diabetes es una afección crónica que afecta la forma en que su cuerpo procesa la glucosa o azúcar en la sangre. Los niveles altos de azúcar en la sangre pueden dañar sus órganos y aumentar su riesgo de complicaciones como enfermedades cardíacas, insuficiencia renal y daño a los nervios.
El anís puede ayudar a disminuir los niveles de azúcar en la sangre al estimular la secreción de insulina del páncreas. La insulina es una hormona que ayuda a las células a absorber la glucosa de la sangre y usarla para obtener energía. El anís también puede mejorar la sensibilidad a la insulina, lo que significa que sus células responden mejor a la insulina y requieren menos para mantener los niveles normales de azúcar en la sangre.
Un estudio encontró que el extracto de anís redujo los niveles de azúcar en la sangre en un 36% en ratas diabéticas después de seis semanas (10). Otro estudio mostró que el aceite de anís mejoró la sensibilidad a la insulina en un 40% en ratones diabéticos después de ocho semanas (11). Sin embargo, se necesitan más estudios en humanos para verificar estos efectos.
- Puede aliviar los síntomas de la menopausia
La menopausia es la transición natural que ocurre cuando los ovarios de una mujer dejan de producir estrógeno y progesterona, las hormonas que regulan el ciclo menstrual. La menopausia puede causar síntomas como sofocos, sudores nocturnos, cambios de humor, sequedad vaginal y osteoporosis.
El anís puede ayudar a aliviar algunos de estos síntomas al actuar como un fitoestrógeno, un compuesto vegetal que imita los efectos del estrógeno en el cuerpo. Los fitoestrógenos pueden ayudar a equilibrar los niveles hormonales y reducir la gravedad y la frecuencia de los sofocos.
Un estudio encontró que tomar 330 mg de extracto de anís diariamente durante ocho semanas redujo el número y la duración de los sofocos en mujeres menopáusicas en un 74% y 57%, respectivamente (12). Otro estudio mostró que tomar 100 mg de aceite de anís diariamente durante cuatro semanas mejoró la densidad ósea y redujo la pérdida ósea en mujeres menopáusicas (13). Sin embargo, se necesitan más estudios en humanos para confirmar estos efectos.
- Puede aliviar las afecciones respiratorias
Las afecciones respiratorias como el asma, la bronquitis, la tos y el resfriado pueden causar inflamación y acumulación de moco en las vías respiratorias, lo que dificulta la respiración. El anís puede ayudar a aliviar estas condiciones al relajar los músculos bronquiales y adelgazar el moco, lo que facilita la expulsión.
El anís también tiene propiedades antibacterianas y antifúngicas que pueden ayudar a combatir las infecciones que causan síntomas respiratorios. El anís también contiene mentol, un compuesto que tiene un efecto refrescante y calmante en la garganta y los pulmones.
Un estudio encontró que el aceite de anís redujo la frecuencia y la gravedad de la tos en pacientes con tos aguda ( 14 ). Otro estudio mostró que el aceite de anís inhibió el crecimiento de Candida albicans, un hongo que puede causar candidiasis oral e infecciones respiratorias ( 15 ). Sin embargo, se necesitan más estudios en humanos para confirmar estos efectos.
Cómo usar el anís
El anís está disponible en varias formas, como semillas, polvo, aceite, extracto y té. Puede usar anís para agregar sabor y aroma a sus platos, especialmente postres, panes, pasteles, galletas y bebidas. También puede usar el anís como un remedio natural para diversos problemas de salud, como se discutió anteriormente.
Aquí hay algunas maneras de usar el anís:
- Para hacer té de anís, remoje una cucharadita de semillas de anís trituradas en una taza de agua hirviendo durante 10 minutos. Colar y disfrutar. Puede agregar miel o limón para darle un sabor adicional.
- Para usar aceite de anís, diluya unas gotas en un aceite portador como el aceite de coco o de oliva y aplíquelo tópicamente a su piel o inhale a través de un difusor o inhalador. También puede agregar unas gotas al agua de su baño para un baño relajante.
- Para usar el extracto de anís, agregue unas gotas a su comida o bebida como agente saborizante. También puede tomarlo como un suplemento siguiendo las instrucciones de dosificación en la etiqueta.
- Para usar polvo de anís, espolvoréelo sobre su comida o bebida como condimento. También puede mezclarlo con miel o agua y tomarlo como jarabe para la tos o el dolor de garganta.
Precauciones y efectos secundarios
El anís es generalmente seguro y bien tolerado cuando se usa con moderación como especia o suplemento. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar reacciones alérgicas o efectos adversos del anís, especialmente si tienen ciertas afecciones médicas o toman ciertos medicamentos.
Algunos de los posibles efectos secundarios del anís incluyen:
- Reacciones alérgicas como erupción cutánea, picazón, hinchazón o dificultad para respirar
- Náuseas, vómitos o diarrea
- Dolor de cabeza o somnolencia
- Cambios hormonales o interferencia con la terapia hormonal
- Sangrado o moretones
- Bajo nivel de azúcar en la sangre o interferencia con medicamentos para la diabetes
- Presión arterial baja o interferencia con medicamentos para la presión arterial
- Convulsiones o interferencia con medicamentos anticonvulsivos
Para evitar estos efectos secundarios, debe consultar a su médico antes de usar anís si tiene alguna alergia, condición médica o toma algún medicamento. También debe comenzar con una dosis baja y aumentar gradualmente según lo tolere. También debe evitar el uso de anís si está embarazada o amamantando, ya que se desconoce su seguridad y efectos en el bebé.
Conclusión
El anís es una especia con un sabor similar al regaliz que tiene muchos beneficios y usos para la salud. Puede ayudar a reducir los síntomas de la depresión, proteger contra las úlceras estomacales, mejorar el control del azúcar en la sangre, aliviar los síntomas de la menopausia y aliviar las afecciones respiratorias. Puede usar anís en varias formas, como semillas, polvo, aceite, extracto y té. Sin embargo, debe conocer los posibles efectos secundarios y las precauciones del anís y consultar a su médico antes de usarlo si tiene alguna inquietud.